domingo, 6 de agosto de 2023

Yo, el rey.

Hace tiempo que digo que la Guerra de la Independencia fue una guerra que ganó España pero perdimos los españoles. Leyendo esta novela, me reafirmo en mi convicción. ¡Qué bien nos hubiesen venido unos años más de ocupación francesa! Probablemente, nos habríamos librado de las Guerras Carlistas, en las que ganó la subdinastía mala y nos libró de la subdinastía peor. Nos habríamos impregnado un poco de republicanismo y de ilustración. Pero no pudo ser. Y, leyendo la novela, me queda la impresión de que nunca hubo la más mínima posibilidad de que fuera.



No hay comentarios:

Publicar un comentario