lunes, 8 de marzo de 2021

Un árbol crece en Brooklyn.

La protagonista es una niña pobre, con un padre alcohólico y cariñoso y una madre que sabe que se equivocó pero sigue enamorada de ese hombre. Viven en un barrio pobre muy cerca de una Nueva York casi inaccesible. A pesar de las penurias económicas, todos están dispuestos a gastar unos pocos centavos en alguna cosa superflua que les haga feliz: una entrada para un baile, una bonita prenda de ropa, un vaso de cerveza...  La protagonista quiere escapar de su pobreza, pero no de su entorno. Y usa la única vía posible: la formación. La novela acaba cuando está a las puertas de la universidad y parece que lo ha conseguido. Uno tiene la tentación de pensar que se trata de una novela alegre a pesar de la miseria, hasta que repara en que, tras casi quinientas páginas, no ha aparecido ni una sola amiga.



No hay comentarios:

Publicar un comentario